martes, 28 de agosto de 2012

BETTY BLUE


Esta vez nos tocó madrugar en 7 colores, y es que la película cabía en un trasnoche, un trago compartido en el medio, una nueva disposición del proyector y el sonido, llegué expectante a la proyección, ya que como hace años no hago, no quise enterarme antes de la cena, de qué se trata el menú. Y es que confiaba –acertadamente- en el criterio de Juky Carrizo, y decidí sentarme frente a la pantalla con el factor sorpresa.Nos introdujo Juky con un concierto de Tan Dun, una puesta multimedia, “Cargado con una cámara de video graba decenas de “joyas”, escenas de música tradicional, piezas que serían la delicia de antropólogos y rescatistas (forenses) de museo. Tan Dun con su memoria “revive” la música que escuchó del “hombre de piedra”, con su educación musical y la experiencia de la búsqueda de fuentes en China crea música como la conocemos; con el video grabado se hace de compañeros de pieza, de compañeros concertistas, de instrumentos de su nueva obra musical, The Map.” con el grande de Yo Yo Ma , violoncellista excelso, realizan una obra que toca los nervios, nos invita a movernos y nos arranca los aplausos…Nno es mi materia específica la música, por lo que me limitaré a decir que es un momento sublime de lo más recomendable, y con eso les invito a deleitarse con el mismo ni bien cuenten con la oportunidad.

A continuación comenzó la película: Betty Blue, drama-tragicomedia-erótica que, con sus 3 horas de duración, me dejó en un primer momento una sensación de que la extensión no era la apropiada (“demasiado larga para lo que nos presenta”, pensé), pero luego de masticarla digerirla sentirla un poco más, tanto en el diálogo que establecimos cuando la película finalizó como en las impresiones que fueron cayendo una a una como si de pequeños velos que fueran desvistiendo los sentidos se tratara: así como la desnudez de los protagonistas, la desnudez de las tramas empieza a mostrarse. Y hablo de las, porque podemos hablar de aquella trama que es la que nos envuelve de manera sutil durante el tiempo que la obra dura y nos hace acompañar la fuerza y el empuje y la luz que se apaga en la protagonista abrazada por la locura, cuando todo se vuelve triste y empieza la pendiente hacia aquello que a Lucas le provocó fuertes náuseas, quizás porque el mismo personaje le enamoró y sintió el dolor de aquel amante fiel. Y de la trama del artista resignado a mantener su obra en una caja llenándose de polvo, por conocer de cerca el funcionamiento de la industria cultural y sus limitaciones frustrantes, hasta que alguien descubre el brillo en su creación y decide usar su fuerza y empuje para conseguir que las palabras de aquel escritor apagado devenido en plomero lleguen a ver la luz, aún a costa de un tajo en el rostro de un editor ricachón con bata de seda en su penthouse kitsch. La trama de la pérdida del ser amado, y esa luz que se ha ido volviéndose ahora musa y leiv motiv para seguir el camino por la que aquella tanta vida entregó….
No quiero extenderme en spoilers o hablar de momentos del film. Quiero limitarme a decir que los logrados personajes, la belleza de los momentos tanto cómicos como los de pleno erotismo así como la tragedia que se perfila cruel y desgarra, convierten esta película en una demostración del amor entregado. Y hablo del amor de la pareja, y el amor por las convicciones ante la crudeza de la realidad que se impone.
Cruda y sensual, como la mismísma Betty, una película que toca fibras y revuelve estómagos. Gracias Juky y a todos los que compartieron este hermoso momento!
Cielo Kunz